Hace unos días desperté con la noticia que Apple y Facebook cubrirán los costes de vitrificación de los óvulos de sus empleadas en EEUU. Todo ello para facilitar a estas mujeres el desarrollo de una carrera profesional de éxito y generar un compromiso para con la empresa. aplazando la maternidad para el futuro. ¿Estamos locos?...
Por experiencia propia se lo que significa vitrificar, en mi caso embriones. De echo mis dos hijas son el resultado de ello, sin embargo al escuchar noticias como ésta no puedo dejar de llevarme las manos a la cabeza.No se trata de moralidad, ni de aplacar el avance de la ciencia, ni siquiera de condicionarla. La ciencia ha permitido que desarrolle una de las facetas más importantes de mi vida, la maternidad. Sin embargo ofrecerla como un "menú del día" no deja de preocuparme. .
Las mujeres tenemos derecho a elegir en que momento de nuestra vida estamos preparadas para ser madre, personalmente creo que para todo hay un momento, y la propia naturaleza es la que lo marca. Si bien es verdad que nuestras antepasadas se convertían en madres a una edad muy temprana, e incluso en países subdesarrollados sigue ocurriendo así, en la actualidad la edad de concepción esta rondando los treinta. Y en esta situación nos planteamos si esta edad es la responsable de la mayor parte de los problemas de infertilidad. En mi opinión creo que sí, que el cuerpo de la mujer no se adapta a la nueva mentalidad, a la moda de realizar un pulso contra natura, y al querer ser dueños y señores de nuestro futuro.
No conozco los datos intrínsecos de los contratos de las mujeres trabajadoras de estas empresas, sin embargo espero que sean conscientes que el vitrificar una serie de óvulos no les asegura el convertirse en madre en un futuro, sino yo hubiera tenido 18 hijos, y nos es así. En el camino de la reproducción asistida, cualquiera que la haya experimentado sabe que deja mucho de uno, que no son tratamientos fáciles, que en lo emocional las mujeres padecemos un huracán de hormonas que dejan su marca para siempre, y que aunque la ciencia ha avanzado y reproduce los patrones para la concepción, no deja de ser un imitador de la naturaleza.
Como mujer, madre y consumidora de la reproducción asistida creo que nos equivocamos al permitir que sea otro quien guarde nuestro derecho a la maternidad, que se esta "vendiendo" el alma al diablo.
Y abro varios interrogantes: ¿si estas mujeres nos consiguen mediante tratamientos quedarse embarazadas, la empresa también costeará una adopción? , y si en algún momento prescinden de sus servicios en la empresa, ¿quién seguirá pagando la vitrificación de los óvulos?, ¿la propia mujer que se ha quedado sin empleo?... El tema da para muchos planteamiento, se abre un debate al respecto. Yo solo espero que las mujeres sigamos siendo libres para decidir en que momento al menos intentamos ser madres, que la ciencia abarate su coste y con ello se permita la disponibilidad para todos aquellos que la necesiten, y que no convirtamos nuestro derecho en moneda de cambio de grandes empresas.
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